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| Imagen: Google |
Te miro, me miras, nos miramos.
Te rozo, me rozas, nos rozamos.
Te abrazo, me abrazas, nos abrazamos.
Siento desvanecer mi piel
cuando tus dedos acarician mi brazo,
en el mismo instante en que nos miramos
y nuestros cuerpos se unen despacio.
Todo se vuelve insinuante
los labios, los suspiros, los latidos,
el perfume de una caricia incesante,
unos ojos que despiertan los sentidos
En el aire mariposas revoloteando,
esa tela de araña tejida en una rama
que atrapa ese momento de dos cuerpos bailando
mientras fluye el amor de sus almas.
Un pequeño nudo en la garganta
que aguanta el deseo de comernos a besos;
sólo queremos amarnos mientras la luna canta
sobre ese cielo que esta impregnado de nuestros rezos.
Me acercas, te acerco, nos acercamos.
Me mimas, te mimo, nos mimamos.
Me besas, te beso, nos besamos.
Esas minimalistas sensaciones, que con amor, se hacen enormes y enteras, capaces de derrocar cualquier tristeza. Simplemente me ha encantado. A destacar, los versos verdes. Grande, Clara!
ResponderEliminarLos versos verdes son las acciones que te llevan a las sensaciones y con amor, como tú bien dices, se hacen enormes.
EliminarGracias por tu firma.
Un placer para mí y un beso para ti.
precioso, preciso y elocuente
ResponderEliminarbesos clara
Me gusta como lo has catalogado
EliminarMuchas gracias!
Un beso y un abrazo
Hermoso verso. Con tu talento solamente puden salir cosas tan bonitas como esta
ResponderEliminarun abrazo
Rubén
Todo lo que sale de dentro es hermoso.
EliminarGracias por siempre estar
Besos y abrazos