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Después de alzar esa bandera blanca
hoy sé que te vas sin mirar atrás
sabiendo que no te voy a amarrar;
te dejaré, sin reproches, marchar.
Después de navegar por esos mares
hoy sé que eres la razón de mis cantares
sabiendo que viviré con pesares;
te recordaré aún estando en otros lugares.
Después de todo
o quizá de nada,
vuelvo a ese cobijo que dejé
aquel día que a tu cuerpo me abracé.
Cómo olvidar tus dedos sobre mi piel
tus labios recorriendo mi querer
y esos ojos que me sedujeron
cuando un te quiero me dijeron.
Hoy sé que a mi rincón volveré
sabiendo que nunca te alcanzaré
pues siempre fuiste el amor de otra
y yo una loca e invisible sombra.
La sombras saben mucho de sentimientos...¡Un placer volver a leer tus versos! No dejes nunca de sentir ni de escribir. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Pinoccio, por tu paso por mi espacio.
EliminarUna sombra lleva oculto todo aquello que no se ve.
Un abrazo
Cada vez que leo tus escritos me sorprendes, como sientes, tus letras son magia, esos dedos parecen que vayan sólos por el teclado.
ResponderEliminarSigue asi, en un orgullo leer tus letras.
Besos y un abrazo
Espero seguir sorprendiéndote. No dejes de adentrarte en mi espacio y vivirás un cuento entre mis letras.
EliminarGracias por dejar tu huella.
Besos y abrazos
No hay luz que te haga sombra. Todo lo que escribes es sencillamente genial.
ResponderEliminarCuando alguien tiene talento se nota, así que mi admiración por todo lo que escribes.
Tu espacio es mucho mas que un rincóndeversos
Felicidades Clara
Ruben
La propia luz es quien hace la sombra, pues cuando ella falta, la oscuridad se hace la dueña.
EliminarGracias por tus palabras y por seguir visitando mi espacio.
Un abrazo, Rubén.