Derretida con el calor de tus brazos
en el mismo instante en que rozaste mi cuerpo;
caí rendida, gemí en silencio
supe que serías mi fiel secreto.
Te esfumas como el viento
vas y vienes sin ningún complejo;
te extraño, te siento...
en mi corazón un claro reflejo.
Perdida entre lágrimas y risas
perturbadas al pronunciar tu nombre;
será mi lengua que sólo busca derroche
y lo encuentra contigo cuando eres mi hombre.
Te diluyes como un sueño
que nunca puede alcanzarse;
te ahogo, te pierdo...
en mi alma todo empieza a dibujarse.
Vacía, sin aliento, persiguiendo tu sombra.
¿Hasta cuándo estaré por ti loca
esperando que tus labios le regalen
la humedad eterna a mi boca?.
Te duermes sin susurrarme
que el sol sale en tu ventana
cada vez que disfrutas de mi arte
mientras sientes el amor que en ti late.
Late el corazón
y latirá
eternamente...
me quieras
en tu mundo
o lejos como el cielo.
Seguiré luchando
por sentir vivo este amor
que duerme en silencio
bajo mi algodón.
Unas letras maravillosas y muy bien engarzadas ...
ResponderEliminarenhorabuena clara
besos
Maravilloso es siempre que vienes a visitarme.
EliminarGracias por estar entre mis versos.
Besos
Cuando el corazón late provoca sentimientos y estos ayudan a realizar una composición tan sublime y romántica.
ResponderEliminarExcelente, Clara.
Late, late... y provoca muchas cosas. Aquí el resultado de un trabajo en conjunto con mi corazón.
EliminarGracias por estar y dejar tu huella.
Abrazos